Cachineros a a domicilio

Joel Juela

The focus of the pandemic in the United States has now shifted from the hard-hit East Coast to the Sunbelt states of California, Florida, Texas and Arizona, which together account for almost half of the new cases nationwide.

New York, where the epidemic appears to be under control, remains the state hardest hit by the pandemic in the U.S., with almost 400,000 confirmed cases and 31,083 deaths, a figure second only to Brazil, the United Kingdom and Italy.

The provisional death toll – 119,959 – has already surpassed the lower end of the White House’s initial estimates, which projected at best between 100,000 and 240,000 deaths from the pandemic.

For its part, the Institute for Health Metrics and Evaluation (IHME) at the University of Washington, on whose models for predicting the evolution of the pandemic the White House often relies, estimates that the United States will reach October with more than 200,000 deaths. EFE

LOS CACHINEROS NO RECIBIERON RESPUESTA POR PARTE

Los vendedores se entrelazan entre los vehículos atascados para vender zumos y chocolatinas a los exasperados conductores. Justo al lado del bulevar principal de Abancay, donde autobuses y coches ignoran los carriles de circulación, hay una calle peatonal llamada Leticia. Está situada bajo una marquesina de cables eléctricos desordenadamente tendidos y flanqueada por edificios bajos antaño brillantemente pintados. Si se sigue caminando, la calle se estrecha aún más hasta que el visitante se encuentra en una animada manzana especializada en la reparación y reventa de aparatos electrónicos.

Un paseo por esta pequeña calle de la capital peruana permite echar un vistazo a una discreta red que desempeña silenciosamente un papel fundamental en la reducción del impacto ambiental de nuestros patrones globales de producción y consumo de dispositivos electrónicos, y ofrece ideas sobre cómo podemos replantear el diálogo sobre cómo fomentar un sistema de productos electrónicos más «sostenibles».

Pequeños motores recogidos de teléfonos públicos antaño funcionales, cables de ordenador, pequeñas placas de circuitos arrancadas de impresoras, teléfonos móviles y muchos otros productos yacen en formación sobre mantas en plena calle.    Cerca, pilas de ordenadores personales permanecen en posición de firmes. En los escaparates y centros comerciales cerrados, donde apenas entra el sol de mediodía, se ven hombres y mujeres trabajando en portátiles y monitores de ordenador, arreglándolos para sus clientes.

MINISTRO INTERIOR DEBE ACTUAR : MAFIA POLICIAL 20

bombilla ecológicaPor Paul Mezier, Master en Sociología, London School of EconomicsCuando hablas con ella, es difícil encontrar el momento que podrías aprovechar para hacerle la siguiente pregunta. Albina Ruiz es una de ellas. Tiene el empuje y la energía concentrada de quienes han luchado para que su visión se haga realidad. Lleva casi tres décadas construyendo un modelo de empresa social, primero en Perú y progresivamente en toda Sudamérica. Ahora trabaja para desarrollarlo en Asia. Con su equipo de Ciudad Saludable, aborda un tema que apenas vende periódicos: el reciclaje como forma empresarial de gestión de residuos en los barrios marginales de ciudades en constante crecimiento.Quise hablar con Ruiz para saber más sobre un caso práctico y resistente de empresa social. Rápidamente me di cuenta de que su propio compromiso proviene de la singularidad de su historia vital. Creció en un remoto pueblo de la selva peruana. Cuando terminó el instituto, sus padres le compraron un billete de ida a Lima para que pudiera ir a la universidad. Allí, su casa estaba en uno de esos pequeños pasajes que son más callejones que calles. Irónicamente, el lugar donde vivía se llamaba «La Jungla», y no había forma de entrar con un coche, y menos con un camión de la basura. La primera vez que llegó allí tuvo que preguntar a sus amigos qué eran realmente los montones de basura: su mente apenas podía procesarlo.Advertisement